Mamiloca desde su trabajo ha escrito esto MUY DEPRISA: en el trabajo tiene poco tiempo:
Era los viernes, si no recuerdo mal. Y era en Cádiz, tacita de plata. Pasaba allí los veranos, con mi familia, con mis primas, que vivían en la calle Zaragoza, junto a la plaza de San Antonio. Mi tío madrugaba muchísimo porque trabajaba en el puerto, en la lonja. Y los viernes madrugaba aún más, y un poco más tarde se pasaba por casa y nos dejaba un tesoro. Un tesoro misterioso, maravilloso, divertido, mágico. Sobre todo mágico. Eran los tebeos de la semana. !Lo menos cinco estupendos tebeos! que nos repartíamos y devorábamos con avidez y la mañana transcurría entre risas y aventuras y nos sumergía en un mundo aparte y distinto, un mundo de sueños donde todo era posible. Esperábamos esa mañana durante toda la semana, y ahora que lo pienso tal vez había en aquello algún motivo escondido; mis tíos, los pobrecitos, casi nunca tenían tiempo para estar solos, y ese día él aprovechaba, nos entretenía con los tebeos y después se echaba una siestita borreguera con su señora... pero eso a nosotros entonces no nos importaba en absoluto, de hecho ni nos enterábamos. Lo importante era la magnitud de ese regalo.
Aquella casa de Cádiz... tenía un patio central y los tres pisos de que constaba el edificio tenían la misma disposición: había una galería en todo el contorno donde daban las habitaciones, y desde donde se podía charlar con todos los vecinos.
Recuerdo los juegos. Y recuerdo los desayunos, las tostadas de barritas de pan recién hecho acompañadas con mantequilla salada... una mantequilla salada riquísima que no he vuelto a encontrar. Salada como el agua del mar que nos esperaba todos los días, ese Atlántico brioso e insuperable, inmenso, mi amante... Era el mar mi amante por esos tiempos, y yo con mis brazos abiertos quería abarcarlo todo, acariciarlo, y hasta el anochecer aquel era mi hogar y mi esposo. Y aquella fue mi primera historia de amor.
El mar y yo.
6 comentarios:
Es usted un sol, señorita.
:)
Como disfrutaba yo con los tebeos, me encantaban los de Zipi y Zape, los TBO y en general todos, me sumergía en un mundo de fantasía...Me has traído muchos recuerdos.
Un abrazo
Muchísimas gracias, caballero, usted tampoco anda mal...
Un beso.
(Ups)
Un beso, Bohemia, me alegra verte por aquí.
tengo yo también una relación muy especial con la mar... ;)
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